Estamos a un día de la trigésima octava edición de la HispaCon (38 añacos ya de festival). En esta ocasión, dada la situación pandémica que estamos viviendo, la convención tendrá lugar de manera virtual, a través del canal de Youtube habilitado para tal efecto, y… me parece maravilloso; como en su día me pareció un gran acierto que la EuroCon de Barcelona decidiera retransmitir las distintas charlas por streaming. Por qué no se ha hecho más a menudo desde entonces, ni idea, pero cómo me alegro de que la actual junta de la asociación Pórtico (aka AEFCFT) tomase esta decisión. Y vaya planazo hay para este fin de semana.

Si aún no sabéis lo que se está cociendo, os invito ya mismo a que le echéis un vistazo a la maravillosa web que se ha montado para la HispaCon. Allí encontraréis cosas interesantes como la FVL (Feria virtual del libro), las jornadas de rol, el listado de ponentes (somos trogollón) y, por supuesto, el programa, que tiene una pintaca tremenda. Vamos, creo que me voy a pasar casi todo el finde pegada a la pantalla 😛 Pero bueno, aquí he venido a hablar de mi libro XD

Pincha en la imagen para verla en grande.

Me podréis ver el careto en tres ocasiones.

• El viernes a partir de las 11:00 en la presentación de novedades de Cazador, donde hablaré de la segunda entrega de Hija de las sombras.
• El viernes a las 18:00 en la charla que mantendremos les finalistas del premio Ignotus en la categoría de novela.
• El domingo a las 16:00 en la charla «No solo de literatura se nutre la autora», acompañada de las maravillosas Kameron Hurley y Rocío Vega.

Y el sábado a las 21:00 es la entrega de premios. Os tengo que confesar que… ¡estoy de los nervios! Creo que me voy a comer los mocos al final (tal como lo veo, la cosa está reñida), aunque dicen que de ilusión también se vive. Mentira, pero bueno, me aferraré a la esperanza… o algo 😛

Pues nada, poco más que decir salvo que disfrutéis de esta HispaCon virtual y mandad mucho amor a les organizadores, que se lo están currando mogollón. Espero que todo salga bien y, lo más importante, siente un precedente para futuras hispacones.