Esta entrada es un aviso. A partir de ahora este blog no permite comentarios.
Cuando me enteré de que, gracias a la ley europea de protección de datos, tenía que incluir formulario para los comentarios, que tenía que buscar el plugin adecuado para la versión de plantilla que tengo (viejita) y que había una posibilidad alta de que me diera problemas porque me niego a upgradear el sistema operativo de mi Mac (joer, me funciona perfectamente —salvo para navegar en internet, donde la inmensa mayoría de páginas se pasan la accesibilidad web por el forro), pues me dije: «A la mierda. Fuera comentarios».
Además, la interacción que tengo con quienes leéis mis desvaríos en este blog procede, principalmente, de Twitter y, en menor medida, de FB. Así, echando un vistazo al número de comentarios que suelo tener por aquí, decidí que ¿pa qué complicarme?
Por otro lado, si alguien tiene cuenta en Goodreads, también podrá dejar comentarios a las entradas del blog, porque como por fin tengo página de GR Author, lo tengo todo sincronizadito, que lo sepáis 😛
Por último, solo comentar que en breve desaparecerán también los comentarios de las entradas previas. ¿Por qué? Pues porque así me aseguro de que no tendré ninguna clase de datos de nadie y que no estoy infringiendo alguna ley sin saberlo.
Ale, ahí dejo el aviso. Y dicen que quien avisa no es traidor.